3 jul 2022

A BUEN ENTENDEDOR POCAS PALABRAS

A propósito de mis grandes deseos de viajar a Lima y cumplir con la invitación de mis primos "Guaraguaos" y "Chiquitines" o a quien le pueda interesar he recordado lo que sigue y que para que se vayan preparando quiero compartirles: "Cuando ya era un muchacho grande mi madre me envió a Lima para pasar una temporada en casa de unas tías que eran bastante acomodadas. Previo al viaje las recomendaciones no faltaban y las más importantes eran que sea un muchacho respetuoso con todos, sencillo y principalmente que a la hora de las comidas dejara de ser pechugón y que comiera lo que me pusieran en la mesa. Me dijo que si me preguntasen por ejemplo qué presa de la gallina más me gustaba yo respondiese "la cabeza y el pescuezo"; y no la pechuga que era mi preferida, y que ellas ya sabrían agradarme con lo mejor. Así que desde la primera vez que me lo preguntaron y que yo de sonso les respondí tal como mi madre me lo había recomendado siempre que mataban gallina la tía decía: La cabeza y el pescuezo denle a Pablito que es lo que a él más le gusta. Y yo tuve que pasar una larga temporada con ellas aguantándome las ganas". Esto lo contó cuando yo era un niño, recuerdo, mi tío abuelo Pablo Ruesta Mastallier un día que justo habían matado gallina y él estaba de invitado al almuerzo. Mi abuelo, mi querido y grande Papá Kiko, sentado a la cabeza de la mesa le dice a mi madre: Tere, sírvele la pechuga a mi hermano que te acaba de mandar una indirecta bien directa. "Si, ya lo oí" dijo mi madre.